Durante la manifestación hubo un fuerte operativo con presencia de la Gendarmería, la Policía Federal y de la Ciudad de Buenos Aires, y se aplicó el protocolo antipiquetes. Las intenciones de la marcha no cambian: un pedido de aumento en los haberes para los adultos mayores (muchos “viven de prestado”, ya que no pueden comprar comida o medicamentos), a la par de una solicitud de no aprobar el veto del presidente.
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Foto: N
Las fotógrafas Camila Rey y Jazmín Orellana, que estaban cubriendo la movilización cerca del cordón policial, fueron sujetadas violentamente contra el piso, durante cerca de diez minutos, y rodeadas por una decena de policías de civil antes de ser trasladadas en un móvil con los cargos de "atentado y resistencia a la autoridad", lo que forma parte de la conducta reiterada en contra de la prensa, como los casos de Pablo Grillo y Rodrigo Abd.
