La CGT sigue el camino de la sumisión y el acatamiento.
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La clase pasiva hace tiempo dejó de serlo, ya que tiene un rol activo en su incansable lucha para buscar mejoras salariales y protestar contra “la entrega y el ajuste” del Gobierno. Junto a distintos sectores sociales y sindicales fue parte de una movilización que estuvo acompañada por diputados y referentes del Frente de Izquierda; en tanto, la central sindical más importante del país mantiene los brazos caídos, apuntando a los enroques directivos más que a velar por los interese de los trabajadores.
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La Asociación de Trabajadores del Estado, mientras tanto, había convocado a un paro nacional para protestar por la “reforma laboral y el reciente acuerdo con los Estados Unidos”, considerados “íntimamente vinculados”; la medida de fuerza se llevó a cabo con un acatamiento del 90%. De esta manera, en las provincias de Chaco, Entre Ríos, San Luis, Santa Fe, Mendoza, Córdoba, Misiones, Corrientes, Tierra del Fuego y Río Negro se realizaron multitudinarias movilizaciones.