Ahora los camaristas Hornos y Carbajo decidieron premiarlo.
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Eduardo Emilio Kalinec, alias Doctor K, logró que le dieran la libertad, pese a estar condenado a prisión perpetua por haber cometido crímenes en los centros clandestinos conocidos como Atlético-Banco-Olimpo (ABO). El Tribunal Oral Federal 2 bonaerense fue el que determinó que había participado en toda la cadena represiva: en los secuestros, en las torturas, en el manejo de los detenidos y en la fase final del exterminio, con las inyecciones para adormecer a quienes serían arrojados en los nefastos vuelos de la muerte.
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Su apodo figura en los archivos judiciales desde 1985, debido a los testimonios de sus víctimas, los cuales fueron cruciales para dictar la condena. Con 73 años de vida pasó preso los últimos 20, ya que fue sentenciado el 21 de diciembre de 2010, pero recién en 2023 la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) consiguió que le dieran la baja de la Policía Federal Argentina. En 2022 la sala de feria de la Cámara Federal de Casación Penal le concedió las salidas.
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El ahora liberado tiene cuatro hijas, y una de ellas, Analía, repudia públicamente los crímenes cometidos por su padre, e incluso lo ha tratado de genocida. Los camaristas, a pesar de tener un informe pericial determinando que el reo no se arrepiente de sus actos, prefirieron darle mayor peso al informe del Servicio Penitenciario Federal -dependiente de Patricia Bullrich, y que se ha convertido en una constante con todos los criminales de lesa humanidad- que señalaba que tenía buena conducta y un pronóstico de reinserción social.