Los trabajadores podrán elegir entre los servicios de una obra social o una empresa de medicina privada.
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El Gobierno argentino confirmó la próxima reglamentación para desregular el sistema de obras sociales sindicales, permitiendo a los trabajadores la elección desde el inicio de su relación laboral, sin restricciones.
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El borrador de la norma establece que las empresas de medicina privada deberán destinar el 20% de las cuotas de sus clientes al Fondo Solidario de Redistribución (FSR), que financia el sistema de salud. Este nuevo aporte ha generado preocupaciones y esperan que las entidades privadas presenten reclamaciones legales.
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La medida también permite la eliminación de la triangulación entre las obras sociales y las prepagas, permitiendo que los trabajadores realicen directamente el aporte a la prepaga si eligen esta opción. La CGT indicó que el problema central en el sistema de salud no se resuelve con esta desregulación, y que es necesario replantear el programa médico obligatorio.
